viernes, diciembre 28, 2007

Recuento de un año histórico en el deporte de Las Tunas
Catapultado por las jornadas inolvidables en las que un pueblo entero celebró hasta el delirio la primera clasificación a postemporada de nuestro equipo de béisbol, el deporte tunero creció como nunca antes para alcanzar un histórico onceno lugar integral en el país, resultado con el cual avanzo dos escalones en la tabla general por provincias.
La justificada euforia por la realización de un sueño largamente esperado por la mejor afición del país, sirvió de indiscutible acicate para que otras disciplinas emergieran con actuaciones relevantes, como los títulos nacionales de primera categoría en el levantamiento de pesas, el ajedrez, el hockey sobre césped, rama femenina y la gimnasia rítmica.
Y qué decir de individualidades del calibre del subcampeón mundial en total y monarca del envión, Yohandrys Hernández, el mejor pesista de Cuba y América; el pelotero Osmani Urrutia, conquistador de su sexta corona de bateo; del también halterista, pero de la categoría juvenil, Alberto Pupo, rey de los supercompletos en la lid universal de la República Checa y el Hada de Shanghai en los Juegos Mundiales de Olimpíadas Especiales, Yenni de la Caridad Rodríguez Salgado, entre otros.
Significativa prueba de la calidad no solo deportiva, sino patriótica y revolucionaria de los atletas de esta tierra que nunca se quedará atrás, fue la postura de la propia Yenni de la Caridad que tras dejar boquiabiertos a todos en Shanghai con sus dos medallas de oro y tres de plata, rechazó el intento de personas inescrupulosas que quisieron comprarle sus trofeos: “No cambio estas medallas por nada. Yo las gané pero pertenecen a mi pueblo y a mi Revolución”.
Las disciplinas punteras en el quehacer deportivo de la provincia durante el año que termina, fueron el ajedrez y el hockey sobre césped, ocupantes del primer lugar integral y la gimnasia rítmica que se ubicó tercera.
En la categoría pioneril, Las Tunas igualó el séptimo puesto del 2006, pero con 55,9 puntos más, similar actuación repitió en la Liga Estudiantil, al mantener el sexto, mas logró 58 unidades por encima. También en los Juegos Escolares se mantuvo el puesto 12; sin embargo el acumulado de puntos aumentó en 84.
Creció Las Tunas en los resultados de la Olimpíada Juvenil, porque con décimo escalón general, superó el onceno del año anterior, mientras que en la máxima categoría, el salto fue de dos escaños, del 13 al 11.
En este séptimo calendario del siglo XXI, los atletas tuneros conquistaron, de manera general, 311 medallas, 76 de ellas doradas, con destaque para los chicos de la Liga Estudiantil y los de la categoría juvenil, que se ciñeron 26 y 24 títulos, respectivamente.
La provincia consolidó su bien ganado reconocimiento de ser una buena anfitriona, al recibir a los participantes de varios eventos nacionales de las diferentes categorías, en los cuales hubo una atención esmerada y exquisita organización, merecedoras de elogios de atletas, técnicos, dirigentes y árbitros.
Uno de los eventos que más llamó la atención por su carácter internacional, el colorido y el alto grado de confraternización de los participantes, fue la Universiada Nacional, con sus lides de atletismo, baloncesto, voleibol y tenis de mesa, que tuvieron en el Instituto Superior Pedagógico Pepito Tey, una villa de lujo.
El clímax en este sentido, lo constituyó la presentación por primera vez en Cuba, de un equipo italiano de fútbol sala, el club Arzignano Griffo, campeón de liga de su país, que enfrentó a la selección cubana en la sala polivalente Leonardo McKenzie Grant, con el beneplácito de su presidente, Andrea Ghiotto, quien confesó que esta ciudad le encanta y se siente muy a gusto entre los tuneros.
¿Quiere decir esto que todo está bien? Nada de eso, hay muchas reservas que explotar y aunque se enfrentan problemas objetivos que dificultan un avance mayor, es preciso resolver deficiencias que son responsabilidad de los hombres, quienes tienen que suplir, con inteligencia y dedicación, algunas carencias.
Es necesario acabar, de una vez, las obras de la Escuela de Iniciación Deportiva Carlos Leyva González, centro que después de 17 cursos no tiene las instalaciones para la práctica sistemática de los talentos de las diferentes disciplinas y espera aún por la terminación de otros objetos que garanticen su capacidad total de dormitorios.
También esperan por su terminación la Academia Provincial de Boxeo y el Centro de Medicina Deportiva, elemento de vital importancia en la atención de la salud no solo de los atletas y sus familiares, sino de una buena parte de la población que habita a su alrededor.
Se han rescatado varias instalaciones deportivas no solo en la capital de la provincia, sino en otros municipios; pero en las comunidades debe trabajarse de manera integral para devolverle la vida a muchos complejos populares que están abandonados. De manera especial y, desde mi punto de vista, necesita resurgir la sala Comandante Paco Cabrera, una plaza de mucha significación para la ciudad de Las Tunas por admitir un uso múltiple.
Estoy convencido de que estos avances constituyen más que logros, acicate para llevar al deporte tunero a los planos estelares. La familia deportiva sabe cuánto le falta para llegar a sentir plena satisfacción, pero está dispuesta a vivir para la tarea, a desterrar el dañino concepto de vivir de ella.
Pudiera argumentarse que los avances son aún discretos, pero escalar dos o tres escaños en la tabla general del deporte en el país es, para los tuneros, una verdadera odisea. Y para que se tenga una idea de lo que digo, sépase que nuestra provincia fue la última del país en tener su EIDE y, como señalé anteriormente, todavía no está concluida, amen de que se inauguró en pleno Período Especial.
Nadie puede construir hacia arriba si no tiene un sólido cimiento, por tanto si la base de la pirámide del deporte de alto rendimiento es la EIDE, esta tiene que ser lo suficientemente fuerte para que prime la calidad en los escolares, en el tributo a la Escuela Superior de Perfeccionamiento Atlético (juveniles) y de allí a las preselecciones de la máxima categoría.
Pero en ese camino andamos, crece la fuerza técnica, cada día son más y mejores los profesores y entrenadores; por eso se avanza, poco a poco, porque las demás provincias nos llevan una considerable ventaja. De todas maneras, hay consenso en que seguiremos creciendo en todas las disciplinas y que nadie se confíe porque creemos firmemente en el viejo refrán que reza: No van lejos los de alante si los de atrás corren bien.


viernes, diciembre 21, 2007

Seleccionados Atletas del Año en Las Tunas
Las Tunas, Cuba.- El pesista subcampeón mundial de la división de 94 kilogramos, Yohandrys Hernández Cobas y la Maestra Internacional con tres normas de Gran Maestra de Ajedrez, Yaniet Marrero López, fueron proclamados Atletas del Año en esta oriental provincia, en reunión celebrada en la sala polivalente Leonardo McKenzie Grant en la que participaron la prensa acreditada y el Consejo de Dirección de Deportes en el territorio.Hernández, ganó todos sus torneos (Nacional en el que estableció récord, similar resultado en los Juegos del Alba, el Manuel Suárezin Memóriam, los Panamericanos de Río y la medalla de oro en el ejercicio de Envión y la de plata en el total, durante el Campeonato Mundial de Tailandia; avales que lo llevaron a ser declarado el Mejor de su deporte en Cuba.Yaniet, por su parte, fue subcampeona nacional, bronce en el Torneo Panamericano de Argentina, ganó tres competencias en Brasil y alcanzó su tercera norma de Gran Maestra, por lo que después del cercano congreso de la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE) debe convertirse en la cuarta mujer de nuestro país en alcanzar el máximo pergamino del Juego Ciencia.También alcanzaron la condición de Más Destacados en deportes colectivos, el jardinero de la selección nacional de béisbol, Osmani Urrutia Ramírez y la mejor jugadora cubana de hockey sobre césped, Yakelín Drike Torres.Urrutia, quien logró su sexta corona de bateo, esta vez con promedio de 371, fue uno de los puntales para que la novena de Las Tunas alcanzara, por primera vez en la historia, su pase a la postemporada; además de ser campeón de la Serie de la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA) y los Juegos Panamericanos de Río-2007 y medallista de plata en la Copa Mundial de China Taipei.La Drike guió al equipo tunero a la conquista y retención del título nacional femenino, torneo en el que encabezó a las goleadoras y fue la mejor jugadora por Cuba en la lid de los Panamericanos de Río, tras la cual fue incluida en el Equipo Todos Estrellas de América, seleccionado por la Federación Continental de Hockey Sobre Césped.El título de Novato del Año, correspondió al novel receptor del equipo de béisbol en la contienda número 46, Osdanis Montero Ferrales, quien estuvo brillante en una posición de tanta responsabilidad, aval que lo llevó a la nómina del plantel cubano a los II Juegos del ALBA y a su posterior inclusión en la principal preselección del país con vistas a la Copa Mundial de China Taipei.Entre los juveniles, en la rama masculina fue seleccionado, el campeón mundial y panamericano de levantamiento de pesas en la división supercompleta, Alberto Pupo Oliva, y en el grupo de las féminas Aliuska Machado Larduet, con sobresalientes resultados en la marcha deportiva.El tritón Ángelo Sainz Vega, con 20 medallas, de ellas 16 doradas recibió los votos para el mejor escolar en la rama varonil, reconocimiento del que se hizo acreedora entre las chicas la especialista de gimnasia rítmica Marianny Jiménez Ibáñez.La designación del Equipo Más Destacado fue para el de béisbol, séptimo lugar en la Serie Nacional número 46, pero protagonista de la primera clasificación de un colectivo de la provincia en la historia de los clásicos cubano del deporte de las bolas y los strikes.En la lista de los otros 10 atletas destacados aparecen Yordanis Arencibia Verdecia (judo), Yanitza Pérez Carbonell (triatlón), Lázaro Bruzón Batista (ajedrez), Yoelkis Cruz Rondón, Yordanis Alarcón Tardío y Dánel Castro Muñagorry (béisbol). Roberto Lemus Domínguez (hockey sobre césped), Adán Rosales Curbelo (pesas), Yan Carlos Arias Pérez (ciclismo) y Yankiel León Alarcón (boxeo),; además de que recibieron menciones especiales Geovanis Ayala Baldonado (fútbol), Dianelis Mensoney Viñales (atletismo), Máikel Góngora Reyes (ajedrez) y Alain Rivas Lorenzo (lucha)El hockey sobre césped fue reconocido el mejor deporte colectivo y la gimnasia rítmica alcanzó el galardón entre las disciplinas individuales y entre los árbitros sobresalió el internacional Eloy Espinosa Pérez (judo) con mención para el también internacional de baloncesto Aldo Estrada Arteaga.Gilberto Gil de Monte Machado recibió el título al mejor entrenador del año en el alto rendimiento, mientras que entre los que trabajan en la base destacó por sus resultados, Yankiel González Carmenate (boxeo). El máximo galardón destinado a los profesores de educación física, lo alcanzó Carlos Lanussa González, quien realiza esas funciones en la Escuela Vocacional de Arte El Cucalambé.Los atletas de la Enseñanza Especial tuvieron una representante indiscutida, ganadora por derecho propio del máximo galardón del año, la Reina de los Juegos Mundiales de Olimpíadas Especiales, celebrados en Shanghai, China: Yennis de la Caridad Rodríguez Salgado, la mejor gimnasta de Cuba con dos medallas de oro y tres de plata.

domingo, diciembre 09, 2007

Reflexiones del Comandante en Jefe
El Titán de Bronce, Antonio Maceo
Fidel hace un recuento sobre la caída en combate de uno de los más prestigiosos patriotas cubanos y de su ayudante Francisco Gómez Toro, y sugiere leer y meditar sobre sus ideas y las de José Martí acerca del deber.
Estoy en deuda con él. Ayer se cumplió otro aniversario de su muerte física. Existen más de cuarenta versiones diferentes del hecho, pero todas coinciden en varios detalles de gran interés.
A Maceo lo acompañaba el joven Francisco Gómez Toro, que había arribado a Cuba por el oeste de Pinar del Río con la expedición al mando del general Rius Rivera. Herido anteriormente en un brazo, Panchito viajó con Maceo de una orilla a otra de la entrada de la bahía de Mariel. Con ellos iban 17 aguerridos oficiales de su Estado Mayor, marinos del bote y un solo hombre de su escolta.
Ese día 7, en las proximidades de Punta Brava, en su improvisado campamento, Maceo y sus oficiales escucharon el relato del autor de Crónicas de la Guerra José Miró Argenter, sobre las acciones del combate de Coliseo, donde la columna invasora derrotó a las tropas del general Martínez Campos. Desde hacía varios días Maceo sufría de una fiebre epidémica alta y dolores en todas sus heridas.
Alrededor de las 3 de la tarde se oyeron fuertes disparos a unos 200 metros del campamento ubicado al oeste de la ciudad de La Habana, capital de la colonia española. Maceo se indigna por el sorpresivo ataque, ya que había ordenado la exploración constante, como era habitual en sus expertas tropas. Reclama un corneta para dar órdenes; no estaba disponible en ese instante.
Salta sobre el caballo y se dirige al enemigo. Da órdenes de abrir una brecha en la cerca de alambre que se interponía entre él y los atacantes. Ante la aparente retirada del enemigo, exclama “esto va bien” segundos antes de que una bala le cercenara la carótida.
Panchito Gómez Toro, al conocer la noticia, llega desde el campamento, dispuesto a morir junto al cadáver de Maceo. Intentó suicidarse cuando se vio cercado y a punto de caer prisionero. Antes escribe una brevísima y dramática nota de despedida a su familia. La pequeña daga, única arma que llevaba consigo a falta de revólver, no penetró lo suficiente con la fuerza de la mano disponible. Un soldado enemigo, al ver que alguien se movía entre varios muertos, casi le desprende la cabeza con un tajo de machete por el cuello.
Cunde la desmoralización con la muerte de Maceo en las fuerzas patrióticas, que eran en su mayoría soldados bisoños.
El coronel mambí Juan Delgado, del Regimiento de Santiago de las Vegas, al conocer lo ocurrido salió en busca de Maceo.
El enemigo había tenido en sus manos el cadáver, despojándolo de sus objetos personales sin darse cuenta de que era el de Maceo, conocido y admirado en el mundo por sus hazañas.
La tropa encabezada por Juan Delgado, en gesto valiente, rescató los cuerpos sin vida de El Titán y su joven ayudante, hijo del General en Jefe Máximo Gómez. Los enterraron después de largas horas de marcha en la altura dominante de El Cacahual. Los patriotas cubanos no dijeron entonces una palabra del valioso secreto.
El rostro ceñudo de Martí y la mirada fulminante de Maceo señalan a cada cubano el duro camino del deber y no de qué lado se vive mejor. Sobre estas ideas hay mucho que leer y meditar.
Fidel Castro Ruz
Diciembre 8 de 2007
8:05 p.m.
(Tomado de la edición digital del periódico 26, Las Tunas, Cuba)
Prohibido subestimar
CHÁVEZ ESTÁ EN EL RING
Por Juan Carlos Camaño
(Presidente de la Federación Latinoamericana de Periodistas)
Estados Unidos se frota las manos. La "oligarquía criolla" –a la que Chávez alude y desafía sin piedad-, baila en una pata. Y las derechas de aquí y allá se envalentonan alardeando del triunfo de la "democracia" que responde a sus intereses de clase. El "dictador" de Venezuela "ha quedado contra las cuerdas", festejan. Y más temprano que tarde "entrará en su ocaso", sueñan. Es la hora de "su hora final", sentencian.Sólo los más cautos –de entre aquellos que quisieran ver a Chávez derrotado por toda la cuenta- saben que una batalla no es la guerra y que un estratega difícilmente se ahogue en un vaso de agua.Muhammed Alí, un peso pesado exquisito, quizás uno de los boxeadores más brillantes de toda la historia, categoría por categoría, sabía ir hacia las cuerdas por propia voluntad, y cuando no, era llevado a las trompadas, especialmente por Joe Frazier, una ametralladora de cerebro más bien estrecho.A gusto, entonces, o por obra de sus rivales, una vez en las sogas, Alí, mientras bloqueaba golpes, preparaba el contraataque: un magistral uno-dos y una inagotable gama de pasos de baile, deleite de entendidos y neófitos. Alí era inteligente, astuto. Rápido de reflejos, de piernas y de manos. Y era un tiempista de excepción. Provocador, corajudo, insolente, guapo, diseñador de su obra y sepulturero de sus agoreros. Alí, valga la reiteración, sabía –como nadie- salir de las cuerdas: el uno-dos y el gancho donde duele y, enseguida, la mano boleada, y el paso al costado para desairar, para recuperar el centro del ring. Y el recto y el golpe ascendente y el descendente; al plexo, al hígado, a la mandíbula: por un triunfo y por los siguientes. Con un par de derrotas, poca cosa.Alí en sí mismo era una estrategia que rompía la lógica y, al mismo tiempo, era una lógica que rompía la estrategia adversaria.Chávez –volvamos al lugar del que no nos fuimos- no se habrá de quedar en las cuerdas, si es que en verdad se encuentra en ellas. Su cerebro, a diferencia del de Joe Frazier, es de aquellos capaces de trazar los caminos de la vida. En Washington lo saben.Alí enseñó, tal vez más que ningún otro boxeador, que el boxeo también puede ser el arte de la estrategia. Chávez, con su propia cabeza, y sin apartarse de lo que nunca dejó de enseñar Fidel -el más grande estratega de dos siglos- volverá a la victoria, para que, entre otras cosas, los ricachones, los explotadores, los Oppenheimer y los Vargas Llosa, terminen sus días atragantados con la espina del socialismo. A un estratega no se lo subestima, diría Mohamed Alí.