jueves, febrero 21, 2008


EL COMANDANTE DE SIEMPRE
Por Pastor Batista Valdés
Por razones obvias del oficio he caminado calles, parques, centros de trabajo... y en nada me sorprenden la ecuanimidad, madurez, comprensión y receptividad con que la población ha acogido el Mensaje emitido este 19 de febrero por el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, donde anuncia y argumenta por qué no aspira ni acepta mantenerse en los cargos que ha desempeñado durante muchos años.
Negar que el documento tuvo una inmediata repercusión en millones de compatriotas sería mentir, y no es ese un rasgo del periodismo que se hace en este país ni algo que permitirían los lectores. Afirmar que dicho mensaje ha alarmado a algún revolucionario sería más burdo e incierto aún.
Tal vez esa naturalidad reinante en todo el Archipiélago, el respaldo espontáneo y abrumador del pueblo hacia las reflexiones hechas por Fidel y la amplia repercusión que ha tenido ese acontecimiento en todo el mundo, sean la causa de cierto revuelo –nada sorprendente- en algunas voces y plumas, más allá de las aguas, espacio y límites nacionales.
La ignorancia, consciente o inconsciente, es fatídica. No querer ver (la realidad de Cuba) conduce a amplificar, titular y hasta "creer" cosas tan absurdas como que el Comandante en Jefe ha renunciado, que ahora sí habrá apertura, que los días de la Revolución están contados...
Solo que tal "conteo" suele correr a cuenta de "las mismas manos y dedos que en vano han preparado maletas desde hace medio siglo para venir a repoblar este Archipiélago con frondosos burdeles, casinos, asesinatos, violaciones, asaltos a mano armada, enfermedades, hambre, desesperanza, suicidios, inseguridad y otros fenómenos para los cuales no hay, ni habrá, retoño posible aquí" (tomado textualmente hoy, con la misma esencia de lo dicho y redicho miles de veces por voces y rostros de pueblo).
Si alguien lo duda, que venga. Nada como ver para –si de verdad se quiere- creer.
Por eso, creo en la nitidez con que el anciano Félix Marrero ve en el mensaje "la inmensa estatura humana y política de Fidel"; creo en la convicción con que una doctora llamada Maritza lo siente igualmente útil reflexionando cada día junto a nosotros; creo en la sabia y predominante opinión de quienes no conciben otra respuesta (al Comandante de las Mil y más victorias) que trabajar más, hacer lo que a cada cubano digno corresponde y estar más unidos e torno a Él, a sus enseñanzas, a Raúl, al Partido y a la Revolución, que no es otra cosa que el futuro.
Dicha inmensa la nuestra (cubanos) de tenerlo ahí: enseñando y dando ese arsenal de aliento, con más tiempo y dedicación que antes. Sabio como cada día. Comandante como Siempre.
Acaso de ahí también mane la roña de quienes prefieren ver renuncia donde lo que hay es PRESENCIA Y CONTINUIDAD, o de quienes deliran otra vez amasando una apertura que, en efecto, nada ni nadie pretende cortar aquí... solo que con las puertas cada vez más abiertas al mismo futuro, 100 por ciento cubano, libre, independiente, honroso, Martiano, Fidelista y Socialista que ha vivido este país, por voluntad de su Pueblo y con El Comandante al frente, desde el primer amanecer del año 1959.
(Tomado de la edición digital del periódico 26, Las Tunas, Cuba)

No hay comentarios: