Las Tunas, Cuba.- El añorado torneo nacional de béisbol, categoría sub-23,
comenzó en cuatro estadios del país y tras los tres primeros enfrentamientos,
lo más significativo es, además del sorprendente invicto del equipo de
Mayabeque, la pésima defensa que, en 24 partidos, sumó la friolera de 74
pifias, a 3,08 de promedio, algo prácticamente inaceptable.
El calendario, en el cual compiten cuatro grupos con igual cantidad de equipos,
contempla 24 choques para cada uno en la etapa clasificatoria, a base de tres
dobles juegos consecutivos y un día de descanso. El apartado A, con sede en
Matanzas, cuenta además con Pinar del Río, Artemisa e Isla de la Juventud, el
B, con asiento en Cienfuegos, se completa con La Habana, Villa Clara y
Mayabeque, el C, asumido por Ciego de Ávila, recibe a Las Tunas, Camagüey y
Sancti Spíritus y el D, acogido por Holguín, también conoce del accionar
de Granma, Guantánamo y Santiago de
Cuba.
En la arrancada que contempló dobles juegos durante martes, miércoles y
jueves, lo más sobresaliente es el paso de Mayabeque, considerado el menos
fuerte del grupo B, pero que batió a
Cienfuegos, La Habana y Villa Clara, para irse al descanso invicto y con
dos rayas de ventaja sobre sus rivales, todos con un éxito y dos fracasos.
El otro invicto en estos primeros compromisos es Santiago de Cuba, ganador
de sus tres partidos ante Holguín, Guantánamo y Granma en el estadio Calixto
García, cuartel general de los cachorros holguineros que, paradójicamente
todavía no han podido hacer la cruz. Los guantameros tienen 2-1 y los
granmenses 1-2.
El grupo A está liderado por Pinar del Río y Matanzas (2-1), una raya por
encima de Artemisa e Isla de la Juventud (1-2). En el apartado C, marchan
igualados Las Tunas, Camagüey y Ciego de Ávila (2-1) y cierra la tabla el
desalmidonado Sancti Spíritus (0-3)
Los especialistas dan de favoritos en el grupo A a Pinar del Río y
Matanzas, en el B a Villa Clara y La Habana, en el C a Ciego de Ávila y
Camagüey y en el D a Holguín y Santiago de Cuba, pero solo el ocupante de la
cima clasifica para la siguiente fase, cuarteto al que se unirán los otros dos
conjuntos con mejor balance de ganados y perdidos.
Sobresale en los compases iniciales el quehacer de algunas figuras jóvenes
que ya tuvieron participación con los equipos de sus respectivas provincias en
la Serie Nacional, pero no todas han podido demostrar sus potencialidades
teóricas, especialmente los lanzadores. Llamaron la atención muchachos
procedentes de las filas juveniles, prácticamente desconocidos, que muestran el
talento necesario como para que sean seguidos de cerca por los técnicos.
A pesar del favoritismo de algunos que muestran nóminas potencialmente
fuertes, no pueden descartarse las sorpresas y los resultados iniciales ya
hacen pensar que los pronósticos pueden irse al piso, especialmente por lo
mucho que significaría en la realidad del terreno el aporte de los chicos que,
acabados de salir de las filas juveniles, están ansiosos por mostrar sus
facultades.
Este sábado se reanudan las acciones y el grupo A, que desarrolla sus
actividades en el estadio Palmar de Junco, Monumento Nacional, serán rivales
Pinar del Río-Isla de la Juventud y Artemisa-Matanzas, en el B del “5 de Septiembre”,
La Habana-Mayabeque y Cienfuegos-Villa Clara, en el C del “José Ramón Cepero”,
Camagüey-Sancti Spíritus y Ciego de Ávila-Las Tunas y en el D del “Calixto
García”, Santiago-Guantánamo y Holguín-Granma.
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