Las Tunas, Cuba.- Los cocodrilos de Matanzas patinaron ante las avispas de
Santiago y perdieron una raya de su ventaja sobre los alazanes de Granma, pero
mantuvieron el puesto cimero en la tabla de posiciones de la temporada número
54 de la pelota cubana, cuando solo restan tres compromisos particulares en el
calendario clasificatorio.
La tropa de Víctor Mesa no pudo con el avispero que la recibió en el
estadio Guillermón Moncada de Santiago y, a duras penas, sacó un triunfo el
sábado no sin antes batallar durante 10 capítulos. Este resbalón fue suficiente
para que los alazanes granmenses se acercaran a solo una raya de la punta,
luego de golpear 2-1 a los cazadores de Artemisa, quienes no pudieron
aprovechar la condición de anfitriones.
En la reanudación de las acciones luego de concluidos los Centrocaribes de
Veracruz, los únicos que no perdieron fueron los leones azules de Industriales,
que pasaron tres veces por encima de los elefantes de Cienfuegos y los
cachorros de Holguín, vencedores dos veces ante los indios de Guantánamo, con
un choque pendiente a causa de la lluvia, en ambos casos de anfitriones en los
estadios Latinoamericano y Calixto García.
En el resto de los duelos programados vencieron por 2-1 los gallos de
Sancti Spíritus a los leopardos de Villa Clara, los tigres de Ciego de Ávila a
los tabaqueros de Pinar del Río, los piratas de la Isla de la Juventud a los
toros de Camagüey y los leñadores de Las Tunas a los huracanes de Mayabeque.
Desde el punto de vista de la lucha por la clasificación el equipo más
perjudicado fue Pinar del Río, el campeón defensor, que está a punto de
quedarse fuera del pelotón de vanguardia. Los discípulos de Alfonso Urquiola tendrán
que ganar al menos siete de los nueve choques que les restan del programa
oficial y un mínimo de dos de los cuatro suspendidos, algo que, por supuesto,
no es imposible, mas se torna extremadamente difícil.
Las plazas siete y ocho con vistas a los play off tienen, desde mi punto de
vista, demasiados aspirantes, especialmente después de que los leopardos de
Villa Clara, que aparecían acomodados en el penúltimo vagón del tren, fueron
expoliados por los Gallos en su visita a la valla del parque José Antonio
Huelga, de Sancti Spíritus y el repunte de los cachorros de Holguín y los
leñadores de Las Tunas, que no se dan por vencidos.
Ahora Matanzas sigue en la cima por su balance de 23 triunfos y 13
descalabros, a una raya de Granma, 20-12, a dos de Artemisa e Industriales,
21-15, a 2,5 de Ciego de Ávila, 20-15, a tres de la Isla de la Juventud, 19-15,
a 4,5 de Villa Clara, 18-17, a cinco de Santiago, 18-18, a 5,5 de Holguín,
16-17, a seis de Las Tunas, 16-18 y Pinar del Río, 15-17, a 6,5 de Guantánamo y
Sancti Spíritus, 16-19, a 8,5 de Cienfuegos, 14-21, a 10 de Camagüey, 13-23 y a
10,5 de Mayabeque, 12-23.
Un simple vistazo permite que se pueda apreciar a seis equipos
prácticamente asegurados, pero las dos plazas restantes, verdaderas manzanas de
la discordia, están al alcance de cinco integrantes de un pelotón compacto que,
en algunos casos chocarán entre sí, por lo cual no se puede descartar una
‘’caída’’, determinante en el momento de ‘’cruzar la raya de sentencia’’, si lo
llevamos a términos ciclísticos.
El panorama es tan complicado para algunos que los enfrentamientos
señalados para comenzar este martes serán de vida o muerte para Pinar del Río,
visitante de Industriales en el complicado estadio Latinoamericano, Villa
Clara, huésped de Holguín en el Calixto García y Las Tunas que viajó a
Manzanillo para lidiar con un inspirado Granma, en estos tres casos,
especialmente el de los Leñadores, todo podría terminar en esta temporada.
En los otros compromisos de principio de semana, los antepenúltimos de la
fase clasificatoria, Matanzas visita a Guantánamo en el estadio Nguyen Van
Troi, Ciego de Ávila a Artemisa, en el 26 de Julio, Mayabeque a Sancti
Spíritus, en el José Antonio Huelga, Cienfuegos a Camagüey, en el Cándido
González y la Isla de la Juventud a Santiago, en el Guillermón Moncada.
Con todo y la gran complicación que tenemos a la vista, es posible que la
definición de los ocho protagonistas de la postemporada no ocurra hasta la
última subserie, en la cual no dudo haya más de uno que, todavía, continúen la
veloz carrera, empeñados en asirse a la baranda del coche de cola y, por qué
no, hacer el viaje de polizón.
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