Por Lic. Armando Jesús González Smith
Con el triunfo revolucionario de enero de 1959, se abre una nueva etapa en la vida social del país, donde el deporte dejó de ser una actividad de privilegio para las clases explotadoras y pudientes para convertirse en una necesidad de las grandes masas de nuestro pueblo.
Es por eso, que unas de las primeras medidas del naciente estado revolucionario, fue la creación el 23 de febrero de 1961, por decreto ley del consejo de ministros, del Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación. (INDER) encargado de regir los destinos del deporte cubano y de las actividades físicas en general.
Cuando aquel 19 de noviembre de 1961, nuestro Comandante en Jefe Fidel Castro, se reúne en sección plenaria con los presidentes de los Consejos Voluntarios Deportivos del país, en el Coliseo de la Ciudad Deportiva capitalina; nace un movimiento que desde hace ya 50 años es el eslabón fundamental de la realización y masificación del deporte en las comunidades de todo el país.
No hay lugar por intrincado que sea, donde no esté algún representante de esta importante fuerza de técnicos voluntarios del deporte, la cultura física y la recreación llevando a la población a la práctica sistemática de las actividades físicas y promoviendo hábitos saludables y calidad de vida al alcance de todos.
A estos hombre y mujeres humildes del pueblo, solo los motiva en su importante labor, el amor al deporte comunitario y la satisfacción que brinda el deber cumplido, ellos son en las comunidades verdadero héroes anónimos, promotores y organizadores de una actividad de gran importancia social y cultural.
En Las Tunas existe un fuerte arraigo de este movimiento de activistas deportivos, que ha logrado con su trabajo alcanzar planos estelares a nivel nacional, destacándose en este sentido al recibir en varias ocasiones estímulos y reconocimientos. El Consejo Voluntario Deportivo “4 de Abril “de Salgacero en el municipio de Menéndez, presidido por José Luís Gutiérrez Leyva, Vanguardia Nacional por más de 20 años consecutivos y que el próximo año arribará a su trigésimo aniversario de fundado. El Consejo Voluntario Deportivo de “Alianza Obrero- Campesinas” en el municipio Amancio presidido por Ramón Puga. En el orden individual han resultado destacados del país activistas como el ya desparecido Américo Morales González, Vanguardia Nacional por más de veinte años, Ramona Castro Rondón, Rafael Leyva Martí, Luís Rondon, Maudelio Leyva y mas recientemente Hector Gonzalez Almanza, Juan Cepero Tejeda, a quienes la Dirección Nacional del INDER estimuló en el Pleno Nacional en Camaguey por su destacado tesón en trabajo y permanencia en el movimiento de activistas por más de 30 años.
Hoy cuando la dirección deportiva del país llama a la implementación del programa“Deporte para Todos”, el movimiento de activistas debe jugar un importante rol con su trabajo en las comunidades, centros de trabajos y estudios, unidades militares, para llevar a todos a la practica sistemática de actividades físicas, el rescate3 de tradiciones, la recreación sana y culta, la captación de talentos deportivos Para el deporte de alto rendimiento y lo mas importante, la promoción buenos hábitos de salud mediante el ejercicio físico y altos estándares de calidad de vida para el pueblo.
Pero junto a todo esto, se hace necesario que las direcciones deportivas del territorio tunero, a través de sus combinados deportivos brinden una esmerada atención a los activistas en lo referente a su preparación técnica y el reconocimiento moral y social al trabajo que realizan, en las comunidades tuneras.
Se debe aprovechar todos los espacios y trazar alianzas estratégicas con los grupos comunitarios, organizaciones políticas y de masas para que de forma sistemática y en concordancia con las situaciones económicas y sociales por las que se vive en el país no dejar de reconocer y estimular a los activistas que mas se destaquen en su trabajo diario.
No podemos pensar que las carencias materiales y las faltas de implementos deportivos, sea la justificación para dejar de reconocer el valioso trabajo que realizan. Multiplíquese el salario que devenga un profesor de deporte por el numero de activistas que hay en el municipio, entonces se dará usted cuenta , cuanto ahorra a la economía del país este recurso humano con su trabajo voluntario, sin señalar la parte espiritual y de bienestar que brindan al pueblo.
Cuando está próximo a cumplirse el 50 aniversario de creado el movimiento, el activismo deportivo sigue siendo el baluarte de la actividad física en las comunidades tuneras.
Con el triunfo revolucionario de enero de 1959, se abre una nueva etapa en la vida social del país, donde el deporte dejó de ser una actividad de privilegio para las clases explotadoras y pudientes para convertirse en una necesidad de las grandes masas de nuestro pueblo.
Es por eso, que unas de las primeras medidas del naciente estado revolucionario, fue la creación el 23 de febrero de 1961, por decreto ley del consejo de ministros, del Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación. (INDER) encargado de regir los destinos del deporte cubano y de las actividades físicas en general.
Cuando aquel 19 de noviembre de 1961, nuestro Comandante en Jefe Fidel Castro, se reúne en sección plenaria con los presidentes de los Consejos Voluntarios Deportivos del país, en el Coliseo de la Ciudad Deportiva capitalina; nace un movimiento que desde hace ya 50 años es el eslabón fundamental de la realización y masificación del deporte en las comunidades de todo el país.
No hay lugar por intrincado que sea, donde no esté algún representante de esta importante fuerza de técnicos voluntarios del deporte, la cultura física y la recreación llevando a la población a la práctica sistemática de las actividades físicas y promoviendo hábitos saludables y calidad de vida al alcance de todos.
A estos hombre y mujeres humildes del pueblo, solo los motiva en su importante labor, el amor al deporte comunitario y la satisfacción que brinda el deber cumplido, ellos son en las comunidades verdadero héroes anónimos, promotores y organizadores de una actividad de gran importancia social y cultural.
En Las Tunas existe un fuerte arraigo de este movimiento de activistas deportivos, que ha logrado con su trabajo alcanzar planos estelares a nivel nacional, destacándose en este sentido al recibir en varias ocasiones estímulos y reconocimientos. El Consejo Voluntario Deportivo “4 de Abril “de Salgacero en el municipio de Menéndez, presidido por José Luís Gutiérrez Leyva, Vanguardia Nacional por más de 20 años consecutivos y que el próximo año arribará a su trigésimo aniversario de fundado. El Consejo Voluntario Deportivo de “Alianza Obrero- Campesinas” en el municipio Amancio presidido por Ramón Puga. En el orden individual han resultado destacados del país activistas como el ya desparecido Américo Morales González, Vanguardia Nacional por más de veinte años, Ramona Castro Rondón, Rafael Leyva Martí, Luís Rondon, Maudelio Leyva y mas recientemente Hector Gonzalez Almanza, Juan Cepero Tejeda, a quienes la Dirección Nacional del INDER estimuló en el Pleno Nacional en Camaguey por su destacado tesón en trabajo y permanencia en el movimiento de activistas por más de 30 años.
Hoy cuando la dirección deportiva del país llama a la implementación del programa“Deporte para Todos”, el movimiento de activistas debe jugar un importante rol con su trabajo en las comunidades, centros de trabajos y estudios, unidades militares, para llevar a todos a la practica sistemática de actividades físicas, el rescate3 de tradiciones, la recreación sana y culta, la captación de talentos deportivos Para el deporte de alto rendimiento y lo mas importante, la promoción buenos hábitos de salud mediante el ejercicio físico y altos estándares de calidad de vida para el pueblo.
Pero junto a todo esto, se hace necesario que las direcciones deportivas del territorio tunero, a través de sus combinados deportivos brinden una esmerada atención a los activistas en lo referente a su preparación técnica y el reconocimiento moral y social al trabajo que realizan, en las comunidades tuneras.
Se debe aprovechar todos los espacios y trazar alianzas estratégicas con los grupos comunitarios, organizaciones políticas y de masas para que de forma sistemática y en concordancia con las situaciones económicas y sociales por las que se vive en el país no dejar de reconocer y estimular a los activistas que mas se destaquen en su trabajo diario.
No podemos pensar que las carencias materiales y las faltas de implementos deportivos, sea la justificación para dejar de reconocer el valioso trabajo que realizan. Multiplíquese el salario que devenga un profesor de deporte por el numero de activistas que hay en el municipio, entonces se dará usted cuenta , cuanto ahorra a la economía del país este recurso humano con su trabajo voluntario, sin señalar la parte espiritual y de bienestar que brindan al pueblo.
Cuando está próximo a cumplirse el 50 aniversario de creado el movimiento, el activismo deportivo sigue siendo el baluarte de la actividad física en las comunidades tuneras.
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