Las Tunas, Cuba.- En un ataque relámpago en el que participó toda la manada, los tigres de Ciego de Ávila “destrozaron” literalmente a los alazanes de Granma en el primer choque de la semifinal que tiene de sede ahora al estadio José Ramón Cepero, al imponerse con desproporcionado marcador de 20 X 0, súper nocao en cinco entradas, ante la complacencia de miles de enardecidos parciales.
Las fieras de Róger Machado, apostatas en su cueva, emboscaron a los Alazanes y desde la primera acción, les cayeron encima a los tiradores visitantes, a quienes no dieron respiro en los tres capítulos iniciales, en los que cinco hombres estuvieron impotentes en su estancia en la llamada colina de los suspiros, convertida en esta ocasión en la de los martirios para el mentor Indalecio Alejándrez.
El abridor de los granmenses, Alberto Soto, se presentó con muy poco en sus lanzamientos y, antes de que explotara en el propio primer capítulo, soportó conexiones de todas las dimensiones, castigo que continuó frente a los relevistas, hasta que cuando cayó el tercer out, la pizarra marcaba un sorprendente 11 X 0 a favor de los chicos de Róger Machado.
Pero el festín no terminaba y los tigres siguieron lanzando zarpazos mortales frente a los impotentes pítchers visitantes, el último de los cuales, el zurdo Asiel Diez, no pudo evitar otras ocho anotaciones en el segundo capítulo y una más en el tercero, aunque logró, al fin, un cero en el cuarto, en tanto sus compañeros solo pudieron ligar par de indiscutibles al estelar Vladimir García, salidos de los bates de Ramón Tamayo, en la apertura del primero y del jugador de cambio, Adrián Moreno, en el quinto.
No hubo casualidad, la alineación avileña, de arriba hasta abajo, se dio banquete, aunque el mayor destaque lo tuvieron Raúl González, Mario Vega, Yoelvis Fiss y Yorelvis Charles (en la foto), quienes dispararon sendos cuadrangulares, el del último con las bases llenas. La ofensiva fue tal que los tigres se quedaron a solo una carrera de igualar el récord en play off de más anotaciones en una entrada que es de 12, logrado por Las Tunas frente a Villa Clara en los cuartos de final de la Serie 46.
Es cierto que, a los efectos de la competencia es una derrota igual que si hubieran caído 1 X 0, pero tal desproporción puede convertirse en un golpe sicológico anonadante, del cual no será fácil que los Alazanes se recuperen inmediatamente. Lo que puedan hacer Alfredo Despaigne y compañía, tiene que verse ya, porque en una serie de estas características hay poco tiempo para responder. Habrá que ver si los toleteros granmenses hacen que, esta noche, Yánder Guevara “pague los platos rotos”, además de que Leandro Martínez “le ponga el cascabel al tigre”.
Más al oeste, en el Palacio de los Cocodrilos, Matanzas esquivó las garras del león azul y lo mordió duro para igualar las acciones de la otra semifinal, apoyándose en los lanzadores relevistas y en la ofensiva oportuna, sobre todo de Guillermo Heredia y Manuel Benavides, para imponerse con marcador de 6 X 3, luego del fracaso del abridor zurdo Ian Rendón y el relevista derecho, Darwin Rafael Beltrán.
Los cocodrilos rojos reinaron en su pantano, luego de arrancar con par de anotaciones frente a Rendón en el capítulo de apertura. Los leones le marcaron una a Joan Hernández en el segundo y dos en el cuarto, por jonrón de Yasmani Tomás, el cual sirvió para igualar porque los de casa habían pisado la goma en el tercero, y así se mantuvo la pizarra hasta el final del sexto innings.
Con el partido igualado Víctor Mesa acudió al derecho Joel Suárez, quien “volvió a sacarle las castañas del fuego” y en definitiva se acreditó la victoria, tras el racimo de tres carreras que lograron los cocodrilos en el final del sexto ante Darwin Beltrán, con protagonismo de Guillermo Heredia que remolcó dos con doblete al jardín central, para anotar después por el tercer cohete de Manuel Benavides a ese mismo territorio.
Industriales amenazó en el octavo, pero Víctor llamó al zurdo Yoanni Yera para trabajar ante el emergente Yoandri Urgelles y le sirvió ponche, para acto seguido sustituirlo por el cerrador Félix Fuentes, quien se encargó del resto al obtener un punto por juego salvado.
Leones y Cocodrilos viajaron hasta La Habana para retomar su duelo en el estadio Latinoamericano en la jornada sabatina. El coloso de la barriada de El Cerro que, seguramente, resultará pequeño para la gran cantidad de aficionados que se dará cita allí, pudiera ser escenario de otro partido tenso que tendrá, trinchera por medio, a dos buenos lanzadores, el local Frank Monthié y el visitante Máikel Martínez, quien ya derrotó a los azules en su propio patio en la fase de clasificación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario