Las Tunas, Cuba.- Los equipos de Granma y Pinar del Río pasaron a semifinales de la Serie 50 de béisbol, tras vencer a Guantánamo y Sancti Spíritus en el séptimo y sexto juegos de sus respectivos duelos de cuartos de final.
Después de su sensacional victoria del viernes para igualar la serie a tres, Granma cargó las pilas y definió temprano ayer frente al extenuado Dalier Hinojosa, cuando respondió a la carrera marcada por los indios en la apertura, con un racimo de seis anotaciones, para ganar definitivamente por amplia pizarra de 10 X 2.
Lázaro Blanco, el sorpresivo abridor granmense, solo pudo sacar un out y solo cargó con una carrera gracias al tremendo relevo de Manuel Vega, el ganador, quien tiró hasta el octavo acto con efectividad casi absoluta. Alberto Soto se encargó de liquidar el noveno.
Guantánamo estuvo cerca de hacer una proeza, pero su ofensiva decayó mucho en los últimos 15 juegos de la etapa clasificatoria, situación que empeoró en la postemporada, a lo que se unió la baja del cerrador Alexánder Rodríguez, lo cual limitó de manera considerable las posibilidades de su cuerpo de lanzadores.
En mi opinión, después de tomar ventaja en el quinto choque, Lescaille manejó mal su pitcheo. El trabajo de Yoenis Turcás en el juego del viernes, el sexto, mereció que se confiara más en él, teniendo en cuenta que Hinojosa y Moreira tenían poco descanso y Guantánamo no estaba contra la pared.
El pitcheo de Turcás mareó por completo a los excelentes bateadores granmenses y estaba a seis outs de lograr el pase a la semifinal. Hinojosa, excelente lanzador, de bola rápida, quiso imponer su ley, pero estaba agotado y admitió el jonrón de Despaigne que empató a una en el octavo capítulo, debió trabajar más de lo previsto y soportó el otro estacazo, este decisivo en el décimo, del propio cuarto bate de los alazanes.
Luego de la igualada en el duelo, también se equivocó el mentor de los indios. La lógica indicaba que el hombre para abrir el séptimo choque era el zurdo Lánder Moreira y entonces tener listo a Hinojosa para un posible relevo cerrador. Lo hizo al revés y su mejor serpentinero no resistió semejante esfuerzo; llamó a Moreira, pero éste tampoco fue el mismo, por lo que solo una actuación efectiva de Douglas Lafargue impidió el nocao.
Bien lejos, al oeste, en el estadio Capitán San Luis, un aguerrido equipo de Pinar del Río destrozó las ilusiones de los gallos de Sancti Spíritus y en un brillante sexto partido, se impuso 2 X 1 para convertirse en el rival de Cienfuegos en la semifinal occidental, contra todos los pronósticos.
Otra vez Yosvani Torres puso humo de tabaco en sus envíos y mareó a los gallos de Lourdes Gourriel, al extremo de que solo les permitió cuatro jits y una carrera sucia en 7,1 innings, mientras sus compañeros le marcaban dos, una de ellas por jonrón de Dónald Duarte, al experimentado Noelvis Hernández, un digno rival desde la lomita.
Los espirituanos hicieron su única carrera en el octavo acto, gracias a un error del camarero local Osniel Madera. El jovencito zurdo Julio Alfredo Martínez se hizo cargo del box e impidió que el choque se empatara y acercó a solo tres outs el pase de su equipo a semifinal.
En el último chance de Sancti Spíritus, Cepeda abrió con cohete al centro; pero el zurdo pinareño ponchó a Yulieski Gourriel y dominó a Eriel Sánchez en foul flay al receptor. Fue entonces cuando una línea tremenda bateada por Yenier Bello golpeó la mano de lanzar de Martínez y debió ser sustituido por Urquiola, quien echó mano a Vladimir Baños, su mejor carta. La tensión creció, porque Liván Monteagudo se apuntó jit por el campo corto y las bases se llenaron de gallos. Compareció el peligroso José Ramón Alfonso, mas el derecho pativerde metió el brazo en cuenta de dos bolas y un strike y lo dominó en palomón inofensivo a lo corto del jardín central.
Un gran triunfo de un conjunto que no estaba en los planes de nadie y que, bien dirigido por Alfonso Urquiola, supo crecerse ante las adversidades hasta colarse entre los cuatro grandes de la Serie de Oro. Y que nadie lo dude, los elefantes de Cienfuegos deberán rendir al máximo de sus posibilidades si quieren imponerle a los tabaqueros su condición de favoritos.
En la cueva de los tigres hubo festín de naranjas y Ciego de Ávila empató a tres el duelo con Villa Clara, al imponerse 7 X 3, con lo cual aparece la posibilidad real de que se rompa el mito que ha acompañado a la tropa de Róger Machado en las postemporadas.
Además, hay un fantasma que empieza a rondar a Eduardo Martín y es el recuerdo de que tenía dos oportunidades y con solo un triunfo ganaba el campeonato anterior frente a Industriales, y se le escapó en casa propia, ahora pudiera pasarle en el pase a semifinales, pero en patio ajeno. Hoy a las 2:00 de la tarde (hora local) comienza el encuentro que definirá el rival de Granma y que debe constituir un duelo de lanzadores entre los derechos Freddy Asiel Álvarez, de Villa Clara y Yánder Guevara, de Ciego de Ávila, mientras que en ambos casos estarán listos todos sus pítchers.
Mi pronóstico de cuartos de final falló en los duelos Cienfuegos-La Habana, sobre todo por la caída del pitcheo de los vaqueros y en el de Granma-Guantánamo por el bajo rendimiento integral de los indios; sin embargo, no me equivoqué en la bronca Pinar del Río-Sancti Spíritus.
Ahora, ¿qué pienso acerca del semifinalista entre Ciego de Ávila y Villa Clara? Bueno, son dos equipos muy parejos, pero considero que la experiencia general y la gran calidad de Freddy Asiel Álvarez, inclinarán la balanza a favor de las naranjas.
Etiquetas: Postemporada Serie 50, béisbol, pelota,. deporte, evento, Pinar del Río, Granma, Villa Clara, Ciego de Ávila
No hay comentarios:
Publicar un comentario