Con una remontada para la historia, el equipo de Cuba derrotó 3-2 a Polonia anoche en el coliseo de la Ciudad Deportiva de La Habana y mantuvo su invicto y el liderazgo con 13 puntos en su grupo eliminatorio de la Liga Mundial de Voleibol-2010.
Los locales que, esta vez cometieron demasiados errores, 28 en total, cayeron en el primer set 19-25, pero se recuperaron en el segundo, sobre todo por una férrea defensa en la net que les proporcionó varios puntos a base de bloqueos, y sacaron una gran ventaja de 25-16, para igualar las acciones.
Reiterados errores de toda índole, fundamentalmente en el servicio y la recepción, provocaron un desplome del sexteto tricolor en el tercer parcial, ganado 25-17 por un equipo polaco que puso de manifiesto su condición de titular de Europa y el porqué está entre los mejores del mundo en la actualidad.
El desconcierto parecía irreversible en las filas de la selección cubana al comenzar el cuarto tiempo. El técnico Orlando Samuels debió realizar varios cambios y al final obtuvo el resultado deseado, porque sus muchachos reaccionaron de manera impresionante con un juego de altísimo nivel, al tiempo que los polacos cometieron varias imprecisiones que, ciertamente, contribuyeron al triunfo local 25-23.
Creció la autoestima de los cubanos, alentados por una delirante afición y la remontada no se hizo esperar en el quinto parcial, el de la bien llamada muerte súbita en la que mucho tuvo que ver el trabajo del suplente santiaguero Yenri Bell, tanto en el servicio, como en la defensa de campo y el ataque.
Los cubanos “le entraron por los ojos” a los polacos y en el mismo comienzo de las acciones sacaron una ventaja de cuatro puntos que no perdieron hasta el éxito definitivo 15-10. Los visitantes acusaron cansancio y cometieron errores garrafales que no perdonan los equipos grandes como es, sin dudas, el cubano.
No se puede negar que la inestabilidad de la joven escuadra tricolor, motivada por su poco roce internacional, necesita una solución, pero también es preciso reconocer que Polonia jugó con gran eficacia en los tres primeros sets y que tiene una calidad tremenda, solo empañada esta noche de viernes por muchos errores al final, tantos que la suma en el partido llegó a 36.
Aunque el juego colectivo fue el que llevó a Cuba a la victoria, volvió a ser el zurdo Fernando Hernández la figura principal con 18 puntos y magnífico trabajo en sus endemoniados servicios. El mejor hombre de los polacos, Jarosv, sumó 16.
Esta noche volverán a enfrentarse estos equipos en el propio escenario de la Ciudad Deportiva de la capital cubana y si Cuba consiguiera la victoria, entonces sus posibilidades de clasificar serían muchas, de manera tal que como yo había adelantado, podría jugar para el 50 por ciento en las visitas a Alemania, Polonia y Argentina, a partir del siguiente fin de semana.
Los locales que, esta vez cometieron demasiados errores, 28 en total, cayeron en el primer set 19-25, pero se recuperaron en el segundo, sobre todo por una férrea defensa en la net que les proporcionó varios puntos a base de bloqueos, y sacaron una gran ventaja de 25-16, para igualar las acciones.
Reiterados errores de toda índole, fundamentalmente en el servicio y la recepción, provocaron un desplome del sexteto tricolor en el tercer parcial, ganado 25-17 por un equipo polaco que puso de manifiesto su condición de titular de Europa y el porqué está entre los mejores del mundo en la actualidad.
El desconcierto parecía irreversible en las filas de la selección cubana al comenzar el cuarto tiempo. El técnico Orlando Samuels debió realizar varios cambios y al final obtuvo el resultado deseado, porque sus muchachos reaccionaron de manera impresionante con un juego de altísimo nivel, al tiempo que los polacos cometieron varias imprecisiones que, ciertamente, contribuyeron al triunfo local 25-23.
Creció la autoestima de los cubanos, alentados por una delirante afición y la remontada no se hizo esperar en el quinto parcial, el de la bien llamada muerte súbita en la que mucho tuvo que ver el trabajo del suplente santiaguero Yenri Bell, tanto en el servicio, como en la defensa de campo y el ataque.
Los cubanos “le entraron por los ojos” a los polacos y en el mismo comienzo de las acciones sacaron una ventaja de cuatro puntos que no perdieron hasta el éxito definitivo 15-10. Los visitantes acusaron cansancio y cometieron errores garrafales que no perdonan los equipos grandes como es, sin dudas, el cubano.
No se puede negar que la inestabilidad de la joven escuadra tricolor, motivada por su poco roce internacional, necesita una solución, pero también es preciso reconocer que Polonia jugó con gran eficacia en los tres primeros sets y que tiene una calidad tremenda, solo empañada esta noche de viernes por muchos errores al final, tantos que la suma en el partido llegó a 36.
Aunque el juego colectivo fue el que llevó a Cuba a la victoria, volvió a ser el zurdo Fernando Hernández la figura principal con 18 puntos y magnífico trabajo en sus endemoniados servicios. El mejor hombre de los polacos, Jarosv, sumó 16.
Esta noche volverán a enfrentarse estos equipos en el propio escenario de la Ciudad Deportiva de la capital cubana y si Cuba consiguiera la victoria, entonces sus posibilidades de clasificar serían muchas, de manera tal que como yo había adelantado, podría jugar para el 50 por ciento en las visitas a Alemania, Polonia y Argentina, a partir del siguiente fin de semana.
Etiquetas: Deporte, Voleibol, Liga Mundial, Cuba, Polonia
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