Beijing-2008
Quedó Cuba con plata en el béisbol
+Cayó ante Corea del Sur en cerrado partido
+Perdieron por el oro Laffita y Correa en el boxeo
Las Tunas, Cuba (23 de agosto).-El equipo de Cuba no pudo cumplir su objetivo de repetir el título olímpico de béisbol, al caer en el partido final frente a Corea del Sur con cerrado marcador de 3 X 2, en la penúltima fecha de competencias de los Juegos Olímpicos de Beijing-2008.
Corea, que fue el único conjunto que transitó invicto por el calendario beisbolero de la cita de China, mereció esta victoria por presentar el mejor rendimiento integral, sobre todo en cuanto a un pitcheo de excelencia y al hermetismo de su defensa.
Antonio Pacheco, el mentor cubano, abrió con el zurdo cienfueguero Norberto González, en busca de contrarrestar la presencia de los bateadores coreanos de esa mano y lo hizo bien; pero una imprecisión sobre un flay corto que picó entre Pared, Yulieski Gourriel y Giorvis Duvergel, se unió a un cuadrangular del inicialista Lee Yusong, impulsador de dos carreras en el propio `primer inning.
A los equipos de calidad no se les puede regalar nada y creo que esa falla defensiva, pese a que se anotó como jit, le costó el partido a Cuba que no pudo conectarle bien al zurdo coreano Ryu Hyungjong.
En el propio capítulo de apertura y ya con dos outs, Michel Enríquez esperó un rompimiento del zurdo y metió la pelota en las gradas del jardín izquierdo para descontar bien temprano, mas a partir de ese momento, el tirador asiático retiró a 12 hombres por su turno.
Con el choque bien cerrado (2 X 1) y con Pedro Luis Lazo en la lomita cubana, quien sustituyó a Norberto González en el sexto capítulo; Corea aseguró dos de ventaja, al pisar la goma en una ocasión después de dos outs, cuando el gigante de Pinar del Río se descontroló, regaló par de boletos y admitió largo doblete al derecho; suficiente para que Pacheco lo sustituyera por Luis Miguel Rodríguez, quien tiró un excelente relevo en el resto del choque.
Un largo cuadrangular de Alexei Bell en el final del séptimo volvió a pegar a los cubanos en la pizarra, pero la oportunidad del oro no se aprovechó en el noveno y los antillanos que abrieron de campeones en la entrada del béisbol al concierto olímpico en Barcelona-92, no pudieron cerrar en Beijing, en la momentánea salida de este deporte para el calendario de Londres, Inglaterra-2012.
¿Qué pasó en el noveno? Héctor Olivera sonó cohete y Michel Enríquez se sacrificó para ponerlo en segunda; entonces el zurdo coreano se descontroló y boleó sucesivamente a Cepeda y Bell. Con el empate en tercera y la posible victoria en segunda por Cuba, los coreanos llamaron al derecho submarino Chong Taehyung, quien obligó a Yulieski Gourriel a batear para doble pley de torpedero a camarero y de éste al inicialista.
Ahora, en una situación como esa, no fue un buen comportamiento táctico del bateador Yulieski Gourriel. El relevista coreano hizo lo correcto y trabajó en la zona de strike, pero el camarero cubano dejó pasar no solo el primero, sino el segundo strike por el centro de la goma; por lo que, presionado en el conteo, entonces salió a buscar un lanzamiento hacia la esquina de afuera, para conectar el roletazo que dio al traste con las esperanzas de todo un pueblo.
Es cierto que se perdió frente a un gran equipo, pero también es real que el rendimiento integral de Cuba no estuvo a la altura de otros eventos; además, los dos juegos frente a Corea no se ganaron por errores e imprecisiones que resultaron fatales. Espero que de este revés puedan sacarse conclusiones provechosas, en un análisis pendiente, incluso si se hubiera obtenido la medalla de oro.
En general la jornada sabatina resultó desafortunada para la delegación tricolor, que pudiera alejarse en la tabla de medallas por países, si tenemos en cuenta que hoy no se consiguió título alguno a pesar de que se auguraban al menos dos.
Una medalla que parecía segura se fue a bolina hoy, cuando las Nuevas Morenas del Caribe, desconocidas en la fase final de la lid femenina de voleibol, cayeron en cuatro sets frente a su similar de China en la batalla por el bronce.
Quien vio a las chicas de Antonio Perdomo durante la etapa de clasificación, debe haberse sorprendido de manera absoluta por la pobre demostración ofrecida frente a Estados Unidos (0-3) en la semifinal y a China (1-3) en la disputa del tercer puesto.
Recibo de lágrimas, servicio muy por debajo de su calidad, bloqueo desaparecido y ataque disminuido, fueron los factores que tiñeron de gris el desempeño de un equipo cubano brillante en la temporada y sobre todo en las eliminatorias de Beijing.
De igual forma, en este sábado sin sol para nuestra delegación, Yéimar López se explotó en el último tramo de la carrera de 800 metros planos y a duras penas entró sexto a la raya de sentencia, con un tiempo muy por debajo de los conseguidos en la clasificación y la semifinal.
Y en el boxeo, los dos cubanos que subieron al ring del Gimnasio de los Trabajadores de Beijingl, se quedaron en plata: Andry Laffita, de los 51 kilogramos y Emilio Correa, de los 75.
Laffita fue superado en toda la línea por el tailandés Sonjit Jonjohorj, sucampeón olímpico de Atenas-2004, quien obtuvo la votación de los jueces 8-2. El resultado no sorprendió porque el asiático salió de favorito.
La sorpresa sobrevino en el combate de Emilio Correa, favorito para vencer al británico James Degale. El cubanito se enredó porque se presentó lento de manos y piernas, se cansó al final y debió conformarse con plata al sucumbir 14-16.
José Antonio Guerra, otra vez en una final olímpica de clavados, realizó una buena actuación, pero en un evento de extraordinaria fuerza, su poco más de 507 puntos no alcanzaron para medalla. Meritorio en grado sumo el quinto puesto entre los más grandes especialistas del mundo.
Cuando resta solo una jornada de competencias y las esperanzas de títulos se ciñen a los dos boxeadores, Yankiel León (54 kilos) y Carlos Banteaux (69); Cuba acumula dos medallas de oro, nueve de plata y 11 de bronce, 22 en total, las cuales solo alcanzan para el puesto 25, muy alejado si se tiene en cuenta que el tiempo se nos acaba.
Quedó Cuba con plata en el béisbol
+Cayó ante Corea del Sur en cerrado partido
+Perdieron por el oro Laffita y Correa en el boxeo
Las Tunas, Cuba (23 de agosto).-El equipo de Cuba no pudo cumplir su objetivo de repetir el título olímpico de béisbol, al caer en el partido final frente a Corea del Sur con cerrado marcador de 3 X 2, en la penúltima fecha de competencias de los Juegos Olímpicos de Beijing-2008.
Corea, que fue el único conjunto que transitó invicto por el calendario beisbolero de la cita de China, mereció esta victoria por presentar el mejor rendimiento integral, sobre todo en cuanto a un pitcheo de excelencia y al hermetismo de su defensa.
Antonio Pacheco, el mentor cubano, abrió con el zurdo cienfueguero Norberto González, en busca de contrarrestar la presencia de los bateadores coreanos de esa mano y lo hizo bien; pero una imprecisión sobre un flay corto que picó entre Pared, Yulieski Gourriel y Giorvis Duvergel, se unió a un cuadrangular del inicialista Lee Yusong, impulsador de dos carreras en el propio `primer inning.
A los equipos de calidad no se les puede regalar nada y creo que esa falla defensiva, pese a que se anotó como jit, le costó el partido a Cuba que no pudo conectarle bien al zurdo coreano Ryu Hyungjong.
En el propio capítulo de apertura y ya con dos outs, Michel Enríquez esperó un rompimiento del zurdo y metió la pelota en las gradas del jardín izquierdo para descontar bien temprano, mas a partir de ese momento, el tirador asiático retiró a 12 hombres por su turno.
Con el choque bien cerrado (2 X 1) y con Pedro Luis Lazo en la lomita cubana, quien sustituyó a Norberto González en el sexto capítulo; Corea aseguró dos de ventaja, al pisar la goma en una ocasión después de dos outs, cuando el gigante de Pinar del Río se descontroló, regaló par de boletos y admitió largo doblete al derecho; suficiente para que Pacheco lo sustituyera por Luis Miguel Rodríguez, quien tiró un excelente relevo en el resto del choque.
Un largo cuadrangular de Alexei Bell en el final del séptimo volvió a pegar a los cubanos en la pizarra, pero la oportunidad del oro no se aprovechó en el noveno y los antillanos que abrieron de campeones en la entrada del béisbol al concierto olímpico en Barcelona-92, no pudieron cerrar en Beijing, en la momentánea salida de este deporte para el calendario de Londres, Inglaterra-2012.
¿Qué pasó en el noveno? Héctor Olivera sonó cohete y Michel Enríquez se sacrificó para ponerlo en segunda; entonces el zurdo coreano se descontroló y boleó sucesivamente a Cepeda y Bell. Con el empate en tercera y la posible victoria en segunda por Cuba, los coreanos llamaron al derecho submarino Chong Taehyung, quien obligó a Yulieski Gourriel a batear para doble pley de torpedero a camarero y de éste al inicialista.
Ahora, en una situación como esa, no fue un buen comportamiento táctico del bateador Yulieski Gourriel. El relevista coreano hizo lo correcto y trabajó en la zona de strike, pero el camarero cubano dejó pasar no solo el primero, sino el segundo strike por el centro de la goma; por lo que, presionado en el conteo, entonces salió a buscar un lanzamiento hacia la esquina de afuera, para conectar el roletazo que dio al traste con las esperanzas de todo un pueblo.
Es cierto que se perdió frente a un gran equipo, pero también es real que el rendimiento integral de Cuba no estuvo a la altura de otros eventos; además, los dos juegos frente a Corea no se ganaron por errores e imprecisiones que resultaron fatales. Espero que de este revés puedan sacarse conclusiones provechosas, en un análisis pendiente, incluso si se hubiera obtenido la medalla de oro.
En general la jornada sabatina resultó desafortunada para la delegación tricolor, que pudiera alejarse en la tabla de medallas por países, si tenemos en cuenta que hoy no se consiguió título alguno a pesar de que se auguraban al menos dos.
Una medalla que parecía segura se fue a bolina hoy, cuando las Nuevas Morenas del Caribe, desconocidas en la fase final de la lid femenina de voleibol, cayeron en cuatro sets frente a su similar de China en la batalla por el bronce.
Quien vio a las chicas de Antonio Perdomo durante la etapa de clasificación, debe haberse sorprendido de manera absoluta por la pobre demostración ofrecida frente a Estados Unidos (0-3) en la semifinal y a China (1-3) en la disputa del tercer puesto.
Recibo de lágrimas, servicio muy por debajo de su calidad, bloqueo desaparecido y ataque disminuido, fueron los factores que tiñeron de gris el desempeño de un equipo cubano brillante en la temporada y sobre todo en las eliminatorias de Beijing.
De igual forma, en este sábado sin sol para nuestra delegación, Yéimar López se explotó en el último tramo de la carrera de 800 metros planos y a duras penas entró sexto a la raya de sentencia, con un tiempo muy por debajo de los conseguidos en la clasificación y la semifinal.
Y en el boxeo, los dos cubanos que subieron al ring del Gimnasio de los Trabajadores de Beijingl, se quedaron en plata: Andry Laffita, de los 51 kilogramos y Emilio Correa, de los 75.
Laffita fue superado en toda la línea por el tailandés Sonjit Jonjohorj, sucampeón olímpico de Atenas-2004, quien obtuvo la votación de los jueces 8-2. El resultado no sorprendió porque el asiático salió de favorito.
La sorpresa sobrevino en el combate de Emilio Correa, favorito para vencer al británico James Degale. El cubanito se enredó porque se presentó lento de manos y piernas, se cansó al final y debió conformarse con plata al sucumbir 14-16.
José Antonio Guerra, otra vez en una final olímpica de clavados, realizó una buena actuación, pero en un evento de extraordinaria fuerza, su poco más de 507 puntos no alcanzaron para medalla. Meritorio en grado sumo el quinto puesto entre los más grandes especialistas del mundo.
Cuando resta solo una jornada de competencias y las esperanzas de títulos se ciñen a los dos boxeadores, Yankiel León (54 kilos) y Carlos Banteaux (69); Cuba acumula dos medallas de oro, nueve de plata y 11 de bronce, 22 en total, las cuales solo alcanzan para el puesto 25, muy alejado si se tiene en cuenta que el tiempo se nos acaba.
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