Ya está en Las Tunas, Yankiel León
Un mar de pueblo recibió en Jobabo a su campeón
Las Tunas, Cuba (28 de agosto).- Un verdadero mar de pueblo inundó ayer las calles de Jobabo, municipio de esta provincia en el cual nació el subcampeón olímpico de boxeo, Yankiel León, para brindarle un extraordinario recibimiento por su destacada actuación en el cuadrilátero de los Juegos de Beijing-2008.
En un día nublado, con esporádicos momentos de fina llovizna, el medallista de plata olímpico de los 54 kilogramos, fue vitoreado por sus coterráneos a lo largo de más de 20 kilómetros, desde el lugar conocido por Las Tablas, hasta la plaza de La Punta, en el poblado cabecera del sureño municipio de Jobabo.
A bordo de un jeep descapotado, el sencillo muchacho que dignificó el nombre de su Patria y que no subió a lo más alto del podio por una injusta actuación arbitral; saludó a la gente que salía a la carretera para mostrarle todo el cariño y el respeto que merece. Visiblemente emocionado y con los ojos empañados por contenidas lágrimas, declaró que jamás había sentido tantas muestras de amor, las cuales agradecía desde lo más profundo de su alma.
La llegada al poblado de Jobabo fue realmente apoteósica. Los vecinos se volcaron a las calles y luego se reunieron por miles frente a la tribuna de la Plaza que sirvió de sede al acto político-cultural, en el cual estuvieron presentes las máximas autoridades del Partido Comunista, del Poder Popular (Gobierno), en el municipio, y del Deporte tanto locales como de la provincia.
Fue el recibimiento de su pueblo a un auténtico héroe deportivo, quien supo defender con el honor y el coraje que caracteriza a los cubanos, las razones de una Revolución que convirtió la sana actividad física en un derecho de todos, complemento ideal de un sistema de salud que propicia una esperanza de vida de 78 años, pese al bloqueo criminal de Estados Unidos.
Los coterráneos de Yankiel León le agradecieron su regreso victorioso con las brillantes medallas de la dignidad y el patriotismo y le entregaron, en un abrazo inmenso, la más preciada para los cubanos de pura cepa, los que ni se rinden ni se venden; la del infinito amor de su pueblo.
La noche anterior, Yankiel también se vio sorprendido por la gran fiesta que le organizaron los vecinos del Comité de Defensa de la Revolución (CDR) Aquiles Espinosa, de la Zona 12, en el reparto Santo Domingo, de la capital tunera, donde reside con su esposa, la entrenadora de baloncesto Magdelis Jiménez Espinosa.
Fue también una gran fiesta, en la que el subcampeón olímpico de Beijing-2008, puso a prueba su corazón, según manifestó con palabras entrecortadas por la emoción. El barrio enteró disfrutó de lo lindo en medio de la calle René Ramos, donde arrolló al ritmo contagioso de la tradicional comparsa local Estampas Tuneras, que se prepara para el Carnaval de este año en la ciudad.
Un mar de pueblo recibió en Jobabo a su campeón
Las Tunas, Cuba (28 de agosto).- Un verdadero mar de pueblo inundó ayer las calles de Jobabo, municipio de esta provincia en el cual nació el subcampeón olímpico de boxeo, Yankiel León, para brindarle un extraordinario recibimiento por su destacada actuación en el cuadrilátero de los Juegos de Beijing-2008.
En un día nublado, con esporádicos momentos de fina llovizna, el medallista de plata olímpico de los 54 kilogramos, fue vitoreado por sus coterráneos a lo largo de más de 20 kilómetros, desde el lugar conocido por Las Tablas, hasta la plaza de La Punta, en el poblado cabecera del sureño municipio de Jobabo.
A bordo de un jeep descapotado, el sencillo muchacho que dignificó el nombre de su Patria y que no subió a lo más alto del podio por una injusta actuación arbitral; saludó a la gente que salía a la carretera para mostrarle todo el cariño y el respeto que merece. Visiblemente emocionado y con los ojos empañados por contenidas lágrimas, declaró que jamás había sentido tantas muestras de amor, las cuales agradecía desde lo más profundo de su alma.
La llegada al poblado de Jobabo fue realmente apoteósica. Los vecinos se volcaron a las calles y luego se reunieron por miles frente a la tribuna de la Plaza que sirvió de sede al acto político-cultural, en el cual estuvieron presentes las máximas autoridades del Partido Comunista, del Poder Popular (Gobierno), en el municipio, y del Deporte tanto locales como de la provincia.
Fue el recibimiento de su pueblo a un auténtico héroe deportivo, quien supo defender con el honor y el coraje que caracteriza a los cubanos, las razones de una Revolución que convirtió la sana actividad física en un derecho de todos, complemento ideal de un sistema de salud que propicia una esperanza de vida de 78 años, pese al bloqueo criminal de Estados Unidos.
Los coterráneos de Yankiel León le agradecieron su regreso victorioso con las brillantes medallas de la dignidad y el patriotismo y le entregaron, en un abrazo inmenso, la más preciada para los cubanos de pura cepa, los que ni se rinden ni se venden; la del infinito amor de su pueblo.
La noche anterior, Yankiel también se vio sorprendido por la gran fiesta que le organizaron los vecinos del Comité de Defensa de la Revolución (CDR) Aquiles Espinosa, de la Zona 12, en el reparto Santo Domingo, de la capital tunera, donde reside con su esposa, la entrenadora de baloncesto Magdelis Jiménez Espinosa.
Fue también una gran fiesta, en la que el subcampeón olímpico de Beijing-2008, puso a prueba su corazón, según manifestó con palabras entrecortadas por la emoción. El barrio enteró disfrutó de lo lindo en medio de la calle René Ramos, donde arrolló al ritmo contagioso de la tradicional comparsa local Estampas Tuneras, que se prepara para el Carnaval de este año en la ciudad.
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